Comprender y superar los prejuicios inconscientes en el proceso de contratación
El proceso de contratación es una de las tareas más importantes para un reclutador, y para los solicitantes de empleo puede ser una experiencia que les cambie la vida. Pero, ¿qué ocurre cuando entran en juego los prejuicios inconscientes y cómo afectan al proceso de contratación? En esta entrada del blog, exploraremos cómo tanto los reclutadores como los solicitantes de empleo pueden verse afectados por los prejuicios y qué pueden hacer para superarlos.
El impacto de los prejuicios inconscientes
Empecemos con un escenario hipotético: un reclutador está revisando una pila de currículos para un puesto vacante. Se encuentra con un currículum de un candidato cuyo nombre no le suena, e inmediatamente hace suposiciones sobre las cualificaciones del candidato y su idoneidad para el puesto. Este es un ejemplo de sesgo inconsciente: el seleccionador está haciendo suposiciones sobre el candidato basándose en su nombre, sin ni siquiera darse cuenta.
La perspectiva del solicitante
Ahora, presentemos al candidato, que es una persona altamente cualificada con experiencia y aptitudes relevantes. Por desgracia, debido a los prejuicios del seleccionador, puede que ni siquiera llegue a la fase de entrevista. Este es un ejemplo clásico de cómo los prejuicios inconscientes pueden afectar negativamente al proceso de contratación.
Estrategias de contratación para superar los prejuicios
Para superar estos prejuicios, los seleccionadores deben ser conscientes de sus propios procesos de pensamiento y cuestionar activamente sus suposiciones sobre los solicitantes de empleo. Para ello pueden utilizar entrevistas estructuradas, revisiones ciegas de currículos y paneles de contratación diversos. Tomando estas medidas, los seleccionadores pueden asegurarse de que evalúan a los candidatos en función de sus capacidades y cualificaciones, y no de sus prejuicios personales.
Estrategias para los solicitantes de empleo
Los solicitantes de empleo también tienen un papel que desempeñar en la lucha contra los prejuicios inconscientes. Pueden tomar medidas para asegurarse de que sus currículos y solicitudes de empleo destacan sus competencias y cualificaciones pertinentes, por ejemplo, redactando los documentos de solicitud con ResuFit. También pueden investigar la empresa y el puesto al que optan para asegurarse de que su solicitud se ajusta a los requisitos del puesto. Por último, los solicitantes de empleo también pueden pedir opiniones a los responsables de contratación para saber en qué aspectos deben mejorar sus solicitudes de empleo.
Ejemplos reales de parcialidad
Los prejuicios inconscientes pueden tener un impacto significativo en el proceso de contratación, tanto para los reclutadores como para los solicitantes de empleo. Si somos conscientes de nuestros propios prejuicios y tomamos medidas para cuestionarlos, podemos garantizar que el proceso de contratación sea justo y se base en las cualificaciones y competencias.
Superar los prejuicios estereotipados
Imagina que vas caminando por la calle y ves a una persona vestida de una manera determinada que puede desencadenar un prejuicio en tu mente. Por ejemplo, puedes ver a una persona que lleva una sudadera con capucha y vaqueros y suponer que no está tramando nada bueno, o puedes ver a alguien que lleva traje y corbata y suponer que tiene éxito y es de fiar.
Estas suposiciones pueden parecer inofensivas, pero pueden tener consecuencias negativas. Por ejemplo, si suponemos que la persona de la sudadera con capucha es un delincuente, es posible que la tratemos con recelo o miedo, aunque sólo esté ocupándose de sus asuntos. Por otro lado, si supones que la persona del traje tiene éxito y es digna de confianza, es más probable que confíes en ella, aunque no se haya ganado tu confianza con sus acciones.
Cuestionar nuestros supuestos
Este tipo de sesgo se conoce como "sesgo estereotipado", por el que hacemos suposiciones sobre las personas basándonos en su apariencia u otras características. El sesgo estereotipado puede ser perjudicial porque puede conducir a la discriminación y el prejuicio, aunque no sea nuestra intención. Para superar el sesgo estereotipado, es importante ser conscientes de nuestras propias suposiciones y cuestionarlas. Podemos hacerlo conociendo a las personas como individuos, en lugar de hacer suposiciones basadas en su apariencia u otras características. También podemos buscar perspectivas diversas y cuestionar nuestros propios prejuicios exponiéndonos a nuevas ideas y experiencias.
Conclusión
En conclusión, todos nos encontramos con situaciones en nuestra vida cotidiana en las que podemos tener prejuicios positivos o negativos. Si somos conscientes de nuestros propios prejuicios y tomamos medidas para cuestionarlos, podremos crear un mundo más inclusivo y equitativo para todos.